Durante la pandemia del COVID-19 se realizaron jornadas consulares en ambientes abiertos como el polideportivo municipal. Es innovador ya que tiene una perspectiva transversal donde distintas áreas de gobierno deben trabajar articuladamente a fin de solucionar consultas y demandas de la población migrante con el objetivo de garantizar el acceso a derechos. Asimismo, la difusión de la actividad se realiza a través de referentes migrantes e instituciones de colectividades que ya poseen un vínculo previo con los y las migrantes. Es una metodología replicable en otros lugares. Inclusive, recientemente está siendo una práctica utilizada por la Dirección de Migraciones de la Nación, la cual realiza un trabajo similar en algunos distritos de la Provincia de Buenos Aires. La iniciativa no posee grandes costes organizativos, no obstante requiere que el Gobierno local tenga una buena articulación y coordinación con las distintas áreas y actores involucrados en el proceso. Asimismo, la predisposición de los consulados es esencial ya que aportan recursos humanos y logísticos para el traslado y trabajo en el territorio. Por último, el Municipio, a través de la Dirección de Relaciones Internacionales, realiza la coordinación general del consulado, en cooperación con la Dirección de Migrantes, la Dirección Nacional de Migraciones y otras áreas como ANSES, Secretaría de Mujeres, etcétera.